El regalo final

Queridos todos:

De vuelta a Madrid escribo la última entrada que tendrá este blog. Mi regalo final es multimedia, como viene siendo costumbre. Un resumen mini reducido de lo que han sido estos maravillosos 5 meses, la mejor experiencia de mi vida. Y mira que creía que la gente exageraba cuando volvían del Erasmus...yo estoy ahora mismo atravesando la crisis post-Erasmus y es realmente duro. A todos los que se lo estén pensando, que lo dejen de hacer, que se vayan a vivir una experiencia que no podrá defraudarles.

Lo mejor que me llevo, por supuesto, es esa maravillosa gente que he conocido allí. No tengo menos que palabras brillantes para ellos. Es duro echar tanto de menos algo que sabes que se ha acabado. Mi amigo Sergio tenía razón cuando dijo que a la vuelta lo pasaría mal. Son demasiadas emociones, demasiadas cosas vividas, demasiados sentimientos.

Un beso a todos.

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Bye Bye, Au revoir, Ciao y Adiós

Queridos todos:

El final ha llegado. A tan solo unas horas para coger el avión hacia Madrid y dejar aquí mi vida durante 5 meses, los amigos, las que ya son hermanas, mi habitación...no se qué escribir.

Los días anteriores no he podido hacerlo por falta de tiempo. Hubiera contado mil cosas sobre lo que ha sido la última semana, la mejor y a la vez la peor del Erasmus. Hubiera relatado lo que han sido las últimas fiestas Erasmus en casas conocidas y en casas desconocidas, las últimas borracheras, los últimos momentos de estar todos juntos disfrutando, lo que han sido las despedidas de uno tras otro, las lágrimas, las bromas...Ha sido imposible encontrar tiempo en el día a día para sentarme a escribir. Ha sido todo un caos.

Ahora que ya está acabado, no encuentro palabras. Tampoco creo que haya que dejar nada por escrito, porque a veces las palabras sobran y ya bastante duro es como para hurgar en la herida. Como siempre he dicho, mejor marcharse con una gran sonrisa y un montón de dulces recuerdos. Mi despedida final no llega hoy, por supuesto. Muy característico de mí, acabará con algo multimedia que aún tiene que realizarse pero que está todo en mi cabeza pensante e inquieta.

Con eso diré adiós a este blog.

Besitos, los últimos desde Bruselas. Los próximos serán aquí, vía a Madrid, y los siguientes en storresg.blogspot.com

Gracias a todos lo que han sentido algún interés por pequeño que fuera en leer este blog. A los amigos y a los nuevos lectores. Si alguno es nuevo Erasmus y ha dado con esta página. Me comprometo a informar de lo que haga falta si tenéis dudas. Sólo con dejarme un comentario con vuestro mail nos ponemos en contacto. Au revoir..

The Final Countdown started!!

Queridos todos:

Ahora ya sí somos un poco todos consciente de que esto finaliza y para siempre. Tras la burbuja en la que hemos vivido en el duro periodo de exámenes, comienzan las despedidas. Alguna gente abandona mañana, otros dentro de unos días. Parece mentira que ya no vayamos a estar aquí más haciendo nuestra vida bruselense..

Por ello, ha comenzado la operación "Final Countdown", en la que hay que pasar mucho tiempo con la gente y hacer muchas quedadas. Está prohibido el quedarse en casa!

Ayer comenzamos la operación con una de esas fiestas Erasmus tan divertidas en la que vas a casa de alguien que no conoces de nada. Lo importante es encontrar el link de conexión entre las 15 personas que vais a colaros y alguien que conozca al dueño o haya sido invitado. En este tipo de eventos, nunca se pregunta que qué haces en la fiesta, pero por si acaso, mejor tener información creíble que decir.

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Alcohol y risas, hasta que la gente acabó por los suelos. Vamos a echar tanto de menos esto, es tan tan diferente a la vida normal de cada ciudad. El espíritu siempre es festivo y se agradece, todo el mundo es bien recibido, todo el mundo tiene esa sensación de.."jo, esto se acaba, te voy a echar mucho de menos"...Que curioso notar cómo las relaciones son diferentes aquí con la gente. En tan relativamente poco tiempo, tanto cariño y buen ambiente mostrado.

Se acabaron los examenes..

Queridos todos:

Al fin ha llegado el momento. Al final acabó el estrés, el sufrimiento, las horas de biblioteca intensas, las horas sin dormir, el francés mezclado con inglés y con español...Se acabó mi periodo de exámenes. Sin embargo, no puedo estar contenta, y no puedo sentir que merezco una fiesta continua y desenfrenada para celebrarlo. De hecho, hoy, no me he sentido con fueras de salir.

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Los días que he estado ausente han pasado en casa encerrada y en la biblioteca de la ULB, punto de reunión para seguir estudiando y además poder ver a los amigos al lado tuyo. Para los próximos Erasmus por venir, un consejo: no os confiéis. Esto no es Italia ni España ni los países del Este de Europa. Aquí el que no estudia no aprueba y lo de "soy Erasmus" sólo vale para algunos profesores. He visto suspender gente a tutiplén, gente con notables y sobresalientes de media en sus duras universidades...mismamente yo, estoy rezando para aprobar alguna de las 3 que al final he tenido. Así que, eso de que los Erasmus no estudian, siento la expresión pero...ni un huevo!

Ayer, un amigo portugués se reía conmigo para poder pasar el último examen. Al descubrir que mi profesora era mujer, me dijo: "No tendrás problemas, tú ponle lo siguiente en el examen bien grande y con mis fotos y listo, aprobada". Ay que introducir momentos cómicos para relajarnos del estrés que han supuesto estos 23 días interminables.

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Lo único que ha salido de la normalidad ha sido la visita de Patruchi y Vero a Bruselas. Sí, efectivamente en una época horrible. Esto del "periodo trágico" ha conseguido que sólo pudiese verlas unas horitas en la noche dos días. No me dió el tiempo y la concentración para más. El primer día que llegaron las llevé a cenar a un sitio que a mí me encanta en Place Flagey, un pub irlandés. Al día siguiente, ya que salí un poquito antes de la biblioteca para hacer la compra, las invité a cenar a casa y cociné!!Aunque parezca mentira, ellas pueden verificar que salió una cena bastante buena para el material que teníamos.

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Era una sensación tan rara tenerlas allí, y entre el caos que era mi vida en aquel momento (viendo suspender a la gente de mi alrededor y sabiendo que yo caería en el mismo agujero). Ya no contaba con verlas por las calles de Bruselas y conociendo mi dulce hogar. Ha sido genial. Son las últimas visitas que he tenido (bueno, mis padres están otra vez aquí para irse llevando cosas para Madrid y para verme, pero no cuenta). La verdad que he tenido una barbaridad de visitas estando aquí. Por una parte, pienso que eso me ha quitado de hacer viajes con mis amigos los fines de semana, pero aún así, ha sido magnífico. La cuenta atrás hacia el final de mi Erasmus ha comenzado y suena el pistoletazo de salida de la "Last Week".

Primero...y fatídico...

Queridos todos:

La presión de la llegada del primer examen me ha mantenido en una cápsula de conocimiento de la economía pública, y no he podido salir de ella hasta hoy...es decir, un día después del examen hecho.

No sólo terminó fatal, es que encima no había manera de terminarlo mejor. El problema no fue la falta de conocimiento (que yo sinceramente creo que podía haber aprobado el examen), el problema fue el tiempo. Tres horas y media duró el examen y no me dio tiempo a terminarlo!!! Era tan sumamente largo...tantísimas hojas que rellenar....tantísimas preguntas que era completamente imposible. Y eso que lo hice en español! No me quiero ni imaginar si lo hubiese hecho en inglés cuántas horas hubiera necesitado para realizar el dichoso examen..7 horas??

Tres horas y media para 15 de teoría y 3 de prácticas y tuve que dejar algunas preguntas literalmente en blanco porque me quitaron el examen de las manos.

Antes de que nos entregaran el papel, miraba a un lado...ahí estaba Lucía (mi compi española de Economía Pública) diciendo que se iba a inventar todo lo que pudiese....atrás estaba Alonso (otro compi chileno) que se preguntaba si hacer el examen en inglés, en francés o en español... suerte de él que tiene un manejo fantástico en los tres idiomas...y ahí estaba yo sabiendo que era totalmente necesario que aprobara la asignatura.

Para mi entender, el examen no está aprobado. Ahora sólo me queda rezar para que el "tengan en cuenta que es Erasmus" me valga lo suficiente para ver un aprobado en el resultado final.

Las cosas, por otro lado, en la casa van a peor. La enfermedad inunda esta casa por todas partes y yo me voy librando debido a mi super-fuerte energía y defensas..jajaj (bueno, seguro que no es por eso).

Sofía cayó enferma e incluso se la tuvieron que llevar al Hospital. Ha estado unos días con una carita realmente espantosa así que ayer, que fui al Carrefour, me acordé de ella...

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Unos caramelos de menta para ahora que está malita...una bolsa de patatillas para cuando esté buena..y una tarjetita fueron mis regalos. Como ya está mejor, hoy nos hemos juntado en la cocina para hacer un desayuno. Algo que no solemos hacer porque siempre se va con prisa, o en mi caso, a veces ni desayuno...esto complica las cosas de juntarnos en la primera hora de la mañana.

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Bueno, pues si Sofia consigue ir saliendo de su letargo, ahora es Chiara la que lo retoma. Fiebre, malestar...la van a acompañar durante estos días. Yo intento salvarme, no se cómo, pero lo intento.

Moriremos congeladas y nos comerá el perro...

Queridos todos:

Primeramente, sí, ya me he enterado de todo lo ocurrido en Madrid y demás lugares gracias al Messenger y luego a TVE internacional. Sí que ha caído bien, eh? Sólo deseo que no os haya tocado la gran nevada dentro del coche y atascados en miles de kilómetros de atasco. Mucho mejor si os ha tocado en casa y habéis podido salir a jugar con la nieve, yo ya estoy aburrida de la nieve por lo que no tengo vuestro sentimiento de alegría cada vez que nieva aquí. jajjaa.

La vida aquí continúa de manera horrible debido a las inclemencias del tiempo. Hace tantísimo frío que ni con la calefacción y sin salir de casa te sientes calentito. Yo he pasado mi día de estudio completamente helada en la silla, con dos pares de calcetines gorditos, dos chaquetas y un albornoz encima. Y ni con esas estaba caliente! Lo de salir a la calle lo dejo para tiempos mejores. Según abres la puerta de calle te llevas un puñetazo en la cara de aire congelado. Fijaos que tengo los labios cortados del frío y ayer solo salí para hacer la compra.

Lo único que he encontrado como solución a la desesperanza de intentar estudiar en mi estado de congelación ha sido lo que me va a salvar mis días de intenso recogimiento en casa con los apuntes...TÉ!

Mirar qué maravilloso paquetito me han traído tan amablemente Sofía y Sergio del supermercado (yo me he negado rotundamente a salir a la calle hasta que no suba la temperatura).

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No podéis haceros a la idea de la sensación tan estupenda que se produce cuando el té casi hirviendo pasa por la garganta...y ese olor!! Es un olor fantástico...se ha convertido como una droga para estos días. Bien, ayer os contaba que nos habíamos abastecido para que esta casa se convierta en la cueva estudiantil que va a ser estos días. Aquí tenemos la prueba de lo que necesita un grupo de chicas para sobrevivir este largo periodo (sobre todo para mí que termino los exámenes la última).

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Ahora el problema que se plantea y vuela por el aire es el caer enfermos. Chiara ya estaba enferma cuando llegamos y Sofía ha empezado con los síntomas hoy. Yo intento no salir de la habitación para librarme...era lo que me faltaba!!Bueno, quizá esté exagerando un poco, pero lo peor que puede acompañar al estrés de saber que no tienes tiempo para prepararte los exámenes como se debiera, es estar con dolores de cabeza y fiebre. ME NIEGO!

¿Qué es lo que pasa con los vuelos que siempre hay problemas?

Queridos todos:

Se acabó lo bueno. Se acabó el ocio desenfrenado, las cervezas, la familia, los amigos, el novio, el Sol, la televisión, el Messenger, la calma... Ha comenzado la cuenta atrás hacia los exámenes de enero, y se nota. La gente intenta centrarse (esos los que están sanos porque alguno hay enfermo que ya tiene bastante) y no hay mención de quedada alguna. Serán tiempos duros a los que el puñetero frío que hace aquí no nos acompaña.

Pero empecemos por los primeros momentos de llegada de nuevo a Bruselas....

Nos ponemos en situación: Sofía (que había venido un día antes a Madrid para dormir conmigo y coger el mismo vuelo barato de ryanair del día 7 de enero) y yo nos disponemos a coger un vuelo a las 15:40 de la tarde. Lo que iba a ser un par de horas antes en el aeropuerto comprando cosas necesarias como tabaco, comiendo y sacando dinero se convirtió en una enorme espera en la cola de facturación de la compañía en Barajas. A 30 minutos de que el vuelo surcara los cielos de España, Sofía y yo olvidamos todos nuestros planes y no nos quedó otra que salir corriendo hacia la puerta de embarque.

Íbamos con Víctor, otro Erasmus español dispuesto a regresar "al hogar belga" para entrar en el desenfreno examentil. Nuestros planes de estudio durante las dos horas de vuelo fueron deshaciéndose cuando alguno ya iba dando cabezadas y caía en un profundo sueño.

Qué sorpresa cuando a 1 minuto de aterrizar entre una espesísima nube (tanto que pensábamos que estábamos a cientos de metros del suelo y nos sobresaltamos inmediátamente con el golpe de las ruedas del avión chocando contra la pista de aterrizaje) noticias de la tripulación: "Señores pasajeros, debido al mal tiempo por un frente en el centro de Europa, el aeropuerto de Charlesroi ha sido cerrado y nos hemos visto obligados a aterrizar en el aeropuerto francés de Lille. Disculpen las molestias y esperamos que sigan volando con nosotros!".

¿Qué???Había oído Francia?? ¿Lille?? Pero es que nadie entendía que nosotros estamos estresados porque en días comienzan nuestros exámenes y hoy contábamos con un montón de horas de la tarde-noche para estudiar? Algún señor también pensaba en sus propios problemas y se ponía a discutir con el azafato antes de que abrieran las puertas.

Vale, tranquilidad momentánea. ¿A cuánto está Lille? ¿Pero dónde nos van a llevar ahora? ¿A Charlesroi?? No, no, a mí que me lleven directamente a Bruselas. Bueno, eso podía haber sido así, sin embargo no lo fue. Minutos después nos informaban que la compañía pondría a nuestra disposición autobuses para ir a Charlesroi.

Para los que no conozcan Bélgica, os cuento que de Charlesroi a Bruselas hay una hora de autobús (con la que ya contábamos), pero no contábamos con una hora y media de autobús de Lille a Charlesroi. Pero ahí no acababan nuestros problemas....

El frío que hacía en la calle no era insoportable, era mucho mucho peor!! Todo estaba nevado...lo que significa peligrosidad en carretera y aumentar el transcurso del viaje hasta Charlesroi a dos horas.

Cuando conseguimos llegar a Charlesroi el caos de reclamaciones a la compañía era tal que nosotros decidimos pasar olímpicamente y comprar los billetes de ida a Bruselas lo antes posible, pero teníamos un enemigo a las puertas del aeropuerto...el gélido frío. Los deditos de los pies primero se dejaban de sentir para alcanzar un dolor de cuchillas de acero clavándose en la piel! Así tuvimos que esperar media hora hasta que llegó el autobús de las narices, y no, no somos idiotas al no esperar dentro del aeropuerto. Es que si no estabas en la calle esperando tenías la posibilidad de no entrar en el bus de las 10 de la noche y tener que esperar al de las 10:45. De nuevo la nieve consiguió que lo que iba a ser una hora se convirtiese en hora y media hasta llegar a Bruselas, coger el metro y luego coger el tranvía hasta casa.

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Con las maletas entre la nieve, muertas de hambre, de cansancio y de frío llegamos a medianoche a casa finalmente. Una odisea...

Esto me lleva a pensar sobre qué leches pasa aquí con los vuelos! Yo casi pierdo el de ida a Madrid, pero es que Sofia lo perdió, otro que yo me se lo perdió, y decenas de personas casi no lo cogen...raro....

Tras el trágico día que hemos llamado "the worst day in Brussels ever lived", hoy ha sido un día de ponerse las pilas. Lo primero después de haber dormido suficientes horas para nuestros maltrechos cuerpos ha sido una ducha reconstructiva. Lo segundo, ir a hacer "la gran compra". (Ayer mirábamos nuestra nevera y nuestros estantes sin encontrar nada de nada que poder comer así que tuvimos que robar a Chiara que ya llevaba unos días aquí).

Con nuestro carrito del mercadillo, Sofia y yo salíamos a la gélida temperatura de la calle que sólo era compensada con un gran Sol, por increíble que parezca. Las ruedas del carrito se salían cada dos pasos debido a la nieve en algunas zonas de la calzada pero con maña lo hemos conseguido solucionar. Ingenuas nosotras que íbamos pensando que en el carrito entraría todo lo que necesitábamos para sobrevivir estos próximos 15 días. La operación exámenes tenía que comenzar con un buen abastecimiento de recursos alimenticios para no tener que volver a salir a la calle y perder concentración (además de la posibilidad de coger un resfriado de la leche).

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Con un pesadísimo carrito y dos bolsas hasta los topes, volvíamos destrozándonos los brazos hacia nuestro hogar orgullosas de economizar nuestro gasto. Nos ha costado un poco pero ahora somos unas maestras de comprar mucho y gastar poco. Aunque, como siempre, lo duro no era llegar a casa sino subir los 4 pisos de escaleras!!

El resto del día..lo que va a ser la monotonía diaria...estudiando. La única distracción ha sido la llegada de Sergio, el novio de Sofi, a casa para quedarse unos días.